miércoles, 2 de mayo de 2018

Biografía de Federico Von Savigny


Nace en Fráncfort el 21 de febrero de 1779, de una familia de Lorena, cuyo nombre deriva del castillo de Savigny cerca de Charmes, en el valle del Mosela. Otra teoría indica que nació en Francia, y como su familia perteneció a los Hugonotes franceses, a quienes les tocó huir a Alemania, por eso agregó la partícula "von" a su apellido que no deja duda de su origen francés.

En 1795, con 16 años, entra en la Universidad de Marburgo, donde, en un estado de salud convaleciente, asistirá a las clases de los profesores Anton Bauer y Philipp Friedrich Weiss, principales pioneros de las reformas del código penal alemán. Tras esto, Savigny visitará diversas universidades, destacando la de Jena, Leipzig y Halle-Wittenberg. De vuelta a Marburgo, consigue su doctorado en el año 1800. En Marburgo llega a convertirse en profesor docente que dará clase sobre código penal.

En 1803 publica su famoso Das Recht des Besitzes (El derecho de posesión). Este libro fue elogiado por el gran jurista Thibaut, que lo califica de obra maestra. Pronto obtiene una importante reputación a nivel europeo, y al momento se vuelve una eminencia en la historia de la jurisprudencia.

En 1804 se casa con Kunigude Brentano, hermana de Bettina von Arnim y el poeta Clemens Brentano, y en este mismo año empieza un viaje por Francia y el sur de Alemania en busca de fuentes nuevas sobre el derecho romano. En esta búsqueda, exactamente en su estancia parisina, lo consigue.

En 1808 fue designado profesor por el gobierno bávaro, donde permaneció año y medio. En 1810 le llamaron por la salida de Wilhelm von Humboldt, para ocupar la cátedra de Derecho romano en la nueva Universidad de Berlín. Aquí uno de sus objetivos sería crear un Spruch-Collegiu, un tribunal extraordinario competente de entregar opiniones sobre casos remitidos a ello por los tribunales ordinarios; y él tomó una parte activa en sus trabajos. Este fue el momento más activo de su vida laboral.

Fue contratado para una conferencia, en el gobierno de la universidad (del cual él era el tercer rector), y como el tutor del príncipe heredero para enseñarle derecho romano, el código penal y la ley prusiana. Una consecuencia importante de su estancia en Berlín fue su amistad con Niebuhr y Eichhorn. En 1814 publica su folleto Vom Beruf unserer Zeit für Gesetzgebung ind Rechtswissenschaft (nueva edición, 1892). Esto era una protesta contra la demanda de la codificación, y fue estimado como una respuesta al folleto de Thibaut que impulsa la necesidad de formar un código para Alemania que debería ser independiente de la influencia de sistemas extranjeros legales. En este folleto famoso, Savigny no se opuso a la introducción de nuevas leyes, o aún un nuevo sistema de leyes, pero sólo se opuso a la codificación propuesta en dos aspectos:

El daño que había sido causado por la negligencia de las antiguas generaciones de juristas no podía ser reparado con rapidez, y decidieron que el tiempo pondría las cosas en su lugar
Miedo a la supuesta ley natural, con su "arrogancia infinita " y su "filosofía mediocre" que arruina el esquema.
El valor verdadero de este folleto es que salvó a la jurisprudencia de las abstracciones, como en las Instituciones juris naturae et gentium de Christian Wolff, y demostró que un estudio histórico de la ley positiva era un precedente de condición al entendimiento de derecho de la ciencia de toda la ley.

En 1815 Savigny funda, con Karl Friedrich Eichhorn, y Johann Friedrich Ludwig Göschen, el Zeitschrift für geschichtliche Rechtswissenschaft, el órgano de la nueva escuela histórica, de la cual él era el representante. En este periódico (vol. iii. p. 129 seq.) Savigny hizo conocer al mundo el descubrimiento en Verona, por Barthold Georg Niebuhr, del texto perdido de Gayo, demostrando que era de Gayo y no de Ulpiano, como sugería Niebuhr.

El resto de la vida de Savigny consiste en poco más que una lista de los honores merecidos que recibió de manos de su soberano, y de los trabajos que publicó con actitud infatigable. En 1815 aparece el primer volumen de su Geschichte des la römischen Rechts im Mittelalter, el último del cual no fue publicado hasta 1831. Este trabajo, al cual su temprano profesor, Weiss, le había incitado, al principio fue requerido para ser una historia literaria de Derecho romano de Irnerius al presente. No siguió la narrativa más allá del siglo XVI, cuando la separación de nacionalidades molestó las fundaciones de la ciencia de ley.

Su método no era simplemente un bibliográfico sino que era filosófico. Esto reveló la historia del Derecho romano, de la rotura del Imperio hasta el principio del siglo XII, y mostró como, aunque considerado muerto, el Derecho romano pervive en cierta manera hoy en día en ciudades, en doctrinas eclesiásticas y enseñanzas de la escuela, hasta que esto floreció una vez más en el esplendor de Bolonia y otras ciudades italianas. Esta historia era una prima opera de muchos trabajos valiosos con los cuales publicó el resultado de sus investigaciones. En 1817 fue designado miembro de la comisión para organizar los estados prusianos provinciales, y también miembro del Ministerio de Justicia en el Staatsrath, y en 1819 se convierte en miembro del tribunal de casación para el Rin Provincias. En 1820 acaba como miembro de la comisión para revisar el código prusiano.

En 1822 una grave enfermedad nerviosa le atacó, y le obligó a refugiarse en viajes. En 1835 comenzó a elaborar su trabajo en el derecho romano contemporáneo, System des heutigen römischen Rechts (8 vols., 1840-1849). Su actividad como profesor cesado en marzo de 1842, cuando fue nombrado Grosskanzler (Alto Canciller), el título dado por Federico el Grande en 1746 al funcionario a la cabeza del sistema jurídico en Prusia. En esta posición llevó a cabo diversas e importantes reformas de la legislación en materia de letras de cambio y el divorcio. Ocupó el cargo hasta 1848, cuando dimitió.

En 1850, con ocasión del jubileo de su obtención de su grado de doctor, apareció en cinco volúmenes su Vermischte Schriften, que consiste en una colección de sus obras menores publicados entre 1800 y 1844. Este evento dio lugar a mucho entusiasmo en toda Alemania en honor del gran maestro y fundador de la moderna jurisprudencia. En 1853 publicó su tratado sobre los Contratos (Das Obligationenrecht), un complemento a su trabajo sobre el derecho romano moderno, en el que demuestra claramente la necesidad del tratamiento histórico de la ley. Savigny murió en Berlín. Su hijo, Karl Friedrich von Savigny (1814-1875), fue ministro de Prusia de relaciones exteriores en 1849. Representó a Prusia en importantes transacciones diplomáticas, especialmente en 1866.

Aportaciones al derecho 

Savigny afirmaba que el Derecho no deriva de manera superficial como decisión de los legisladores, sino que se forma en  la sociedad, y acorde a las peculiaridades y condiciones históricas de cada una, y también en el convivir de la colectividad. Savigny amplió y aplicó la visión de la escuela histórica al derecho, especialmente al Derecho Privado. Con su experiencia y conocimientos específicos, modernizó al Derecho Romano ya conocido haciendo importantes avances en el Derecho Civil.



El derecho de posesión
En el campo del Derecho Civil, Savigny dedicó una tesis doctoral al Derecho de Posesión, creando con ella la teoría subjetiva, la cual comprendía que para que existiese posesión sobre una cosa debían coexistir dos elementos, el corpus y el animus dominis. El corpus, sería el elemento material, la sujeción física efectiva de la cosa, y se materializa con el contacto directo de la cosa con la persona. Con respecto al animus, la teoría subjetiva defendía la tesis de que el animus significa la intención de comportarse como lo haría el propietario, conducta que solo puede ser entendida si se transmitía la posesión de la cosa por el titular originario.



Aportes al Derecho Internacional Privado
Ahora bien, en el área del Derecho Internacional Privado, Savigny fue pionero en considerar la Relaciones Jurídicas como punto de partida y fuente del Derecho Internacional Privado, haciendo que las leyes internacionales fueran establecidas de acuerdo a su ámbito espacial. De esta manera, se aísla la relación jurídica para determinar su naturaleza y así poder encontrar la regulación más adecuada. Como resultado, Savigny reconoció la existencia de la necesidad de una ley extranjera que pueda regular relaciones jurídicas que sean similares.



En otras palabras, para Savigny no existe una diferencia substancial entre el Derecho Internacional Privado y el Derecho Doméstico, puesto que en ambos se encuentra el mismo elemento determinante de Derecho: las relaciones jurídicas. Lo que quiere decir, es posible que pueda existir una regulación común entre relaciones dentro y fuera de los Estados, adoptando de ésta manera un principio de inclusión, que permita establecer más y mejores relaciones jurídicas.



Este método savigniano tuvo como consecuencia dos postulados importantes: primero, que exista una posibilidad cierta de que existiera una coordinación o articulación entre los distintos ordenamientos jurídicos; y segundo, que exista la posibilidad de elaborar un conjunto de reglas que fueran comunes para la regulación de los conflictos que pudiesen suscitarse entre leyes. Esta noción se ajusta bastante a la realidad internacional y por ende se considera que el pensamiento savigniano configura la intención del Derecho Internacional Privado de nuestros tiempos. 

Incidencia en la Jurisprudencia Alemana
En la Alemania del siglo XIX, se discutía entre la doctrina si era necesario una organización y unificación del derecho civil. A lo que Thibaut era uno de los representantes a favor de la codificación del derecho civil en Alemania, alegando que la no existencia de un código profundizaba la incerteza y el desorden en el ordenamiento jurídico alemán. Por esta razón, era necesario el establecimiento de un Código Nacional Alemán que pusiera fin a la característica dispersión en el Derecho Alemán.



Como crítico de esta posición, Savigny reafirmaba que la expresión mas valiosa del Derecho y sobre todo el de Derecho Alemán, era el Derecho Romano y su adopción en el Derecho Alemán era esencial para la eficacia de este último y que, dada la heterogeneidad de los pueblos que conformaban Alemania para la época, los intentos por unificar a la nación bajo un mismo código civil no responderían acertadamente a las realidades históricas de cada uno. 



Savigny criticó enfáticamente el hecho de que ésta codificación respondía a una creación artificial del Derecho, y que por tanto era opuesto a la histórica elaboración de los juristas romanos quienes habían dejado como legado las instituciones más importantes del Derecho. Y en efecto, la fuerte oposición de Savigny logró que se paralizaran los esfuerzos de perseguir cualquier proyecto de codificación en Alemania, sin embargo, a lo largo del tiempo dichos esfuerzos se retomaron y dieron a Alemania uno de los mejores códigos civiles.

Conclusión 
En cada uno de los ámbitos del Derecho Savigny logró aportar grandes contribuciones, y aunque su pensamiento fue criticado por muchos, su elocuencia y lógica manera de presentar sus teorías le otorgo el respeto y la credibilidad que hoy en día le consagra. Su incansable búsqueda por la verdad y por el origen de la naturaleza del Derecho, llevó sus tesis al plano político y legislativo, permitiéndose reunir junto a ellas un grupo de seguidores que prolongaron su influencia a lo largo del siglo XIX. Esperamos te haya gustado nuestra explicación, hasta una próxima oportunidad.
https://www.youtube.com/watch?v=Am0tfgZJWM0
https://www.youtube.com/watch?v=Am0tfgZJWM0

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Biografía de Federico Von Savigny

Nace en Fráncfort el 21 de febrero de 1779, de una familia de Lorena, cuyo nombre deriva del castillo de Savigny cerca de Charmes, en el...